Pagar por contenido: el dilema de internet

Durante años nos hemos enfrentado a la gran inquietud: ¿Cómo hacemos de Internet algo rentable? ¿A alguien se le ocurre una gran idea? ¿La publicidad? ¿Un milagro? De una u otra forma es necesario que haya quien invierta, quien consuma servicios pagos, o almas muy altruistas que donen a una gran causa.

#YoCon8000pesos
Seguramente muchas de mis seguidoras han oído al menos hablar de Susana y Elvira, el exitoso blog que se convirtió, me atrevería a decir, en la primera web serie exitosa en Colombia.

Una serie que ha ganado miles de adeptos durante estos tres años (en Facebook ya tienen más de 3.000 seguidores) y que ha dado pie a que muchas otras productoras crean en este modelo y creen cosas maravillosas como Adulto Contemporáneo.

¡Oh sorpresa! Justo cuando todos los seguidores (especialmente seguidoras) esperaban ansiosamente la llegada de la tercera temporada de la serie, protagonizada por Manuela González y Mabel Moreno, se enteraron, de la que fue para muchos una terrible noticia: a partir de ahora Mimosa TV cobrará una mensualidad de $8.900 para acceder a sus contenidos. La reacción, de furia, indignación y desprecio no se hizo esperar en la red.

Si bien, hay problemas graves de comunicación por parte de las autoras del blog y la productora (como no decir con claridad a que contenidos tendrán acceso los usuarios o la forma de pago de la mensualidad), me tomé la molestia (si, fue una verdadera molestia) de leer cada uno de los comentarios que los seguidores furiosos publicaron en las redes sociales criticando que un grupo de profesionales buscaran una forma de financiar su trabajo.

No podemos seguir pretendiendo que todo sea gratis en internet. Yo fui usuaria durante muchos años de cuevana.tv, vi todas mis series gratis o las descargué ilegalmente, hoy estoy dispuesta a pagar por un servicio como Netflix (cuando me ofrezca mis series al día), así como pago la mensualidad de mi servicio premium en Spotify y compro aplicaciones para mi teléfono. Tenemos que dejar de creer que porque las cosas son virtuales, sus recursos también.

Y no me refiero únicamente al caso de Susana y Elvira, el cual pagaré con mucho gusto cuando me garanticen buen contenido, sino a muchos otros servicios pagos, que la gente se rehúsa a pagar (valga la redundancia) sólo porque están en internet. La vida está cambiando con internet, servicios que anteriormente eran completamente tangibles, hoy son netamente virtuales, y por eso, no pierden su valor. Eso si, es menor.

No es lógico pagar lo mismo por comprar música en iTunes, que por un CD, o lo mismo por un libro físico que por un e-book, baja su costo porque bajan los materiales. Pero hay algo que nunca dejará de valer, y es la producción intelectual que implica cada cosa que vemos en la red.

Es hora de pensar, dejar la tacañería y tocarse el bolsillo. Tenemos que dejar de pensar que en internet es todo gratis.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s